agosto 06, 2008

ENTREVISTA AL ESCRITOR PABLO SIMONETTI EN PERU 21



MEJOR FUERA DEL CLOSET

Autor: Esther Vargas

Se descubrió como escritor casi al mismo tiempo que se declaró gay ante su mamá. Pablo Simonetti (Chile, 1961) lo tuvo claro. Quizás porque nunca quiso vivir una doble vida, una historia de engaños, un mar de desencuentros. Quizás porque nunca quiso estar en los zapatos de Diego Lira, Manuel y Laura, los tortuosos personajes de La razón de los amantes (Editorial Planeta), la novela que presentó en la Feria Internacional del Libro. Diego Lira es un abogado gay que llega a la vida de Manuel y de Laura para trastornarla, para ponerla de cabeza y sin retorno.

Fue un trago amargo para mis padres, dice Pablo al recordar cómo reaccionaron cuando les dijo que era gay. Tenía 26 años, una edad que –en mi opinión– es bastante avanzada para salir del clóset. Hoy, chicos y chicas abren la puerta del armario antes de sacar el DNI. Pero la generación de Simonetti lo hacía a los 28, por lo menos en Chile.

-Mi padre murió después de que yo saliera del clóset. Él estaba con Parkinson y era un hombre amedrentado por la enfermedad. Se lo dije a mi madre y ella me dijo: “No le contemos a papá”. Se lo tomó mal al principio, pero luego, al verme feliz con mi pareja, con mi trabajo (me hice escritor y dejé la ingeniería), con mi vida, comenzó a aceptarlo. Yo andaba mal y, de pronto, estuve bien, estuve pleno. Y ella comprendió. Yo me armé una vida feliz. Yo no quería una vida triste. Yo quería una vida amplia y libre. Siempre les digo a los chicos que están en esa encrucijada que hagan bien todo, que trabajen en lo que más les gusta y que se consoliden. Eso da libertad. Así no hay que mirarle la cara a nadie. En esa libertad está la posibilidad de que tu vida no sea un continuo arrancar. Uno tiene que encontrar una forma positiva de vida.

Muchos prefieren estar dentro del clóset. Crees que es la manera más cómoda de sobrevivir sin agresiones, sin ofensas y sin dar explicaciones…
No lo creo. Dentro del clóset no puedes hacer ni defender nada. La sociedad está cambiando, y hoy el chico que se siente atraído por otro chico no se hace tanto problema en decirlo. Lo más importante, creo yo, es que uno tenga el derecho al cariño, y al amor de los suyos, y a un trabajo. Si no tienes derecho a lo que te digo, te están discriminando.

Hay escritores gays que no se compran los problemas de las minorías. En Chile, tú eres una de las voces que más se pronuncia contra la discriminación.

Creo que debo hacerlo, y me siento muy a gusto. Es una labor que uno debe realizar. No se lo digas a nadie ayudó mucho. La ficción es una herramienta muy poderosa porque se cuela en el alma. Creo también que hay que hacer una actividad política. Hay que generar una visibilidad argumentativa que no tenga que ver con la pluma sino con el sentimiento.

Diego, el amante gay, llega efectivamente a una relación congelada…
Sí. Tiene la estructura de un drama griego. Lo que mueve el drama es el destino, el destino yo lo cambié por el futuro. Diego es un tipo que ha dejado su familia oligárquica para convertirse en un hombre de izquierda, ha dejado su mundo de poder, su bufete de abogados, lo ha dejado todo.

Laura y Manuel tienen un futuro –digo yo– como tieso, donde no hay posibilidad de renovar vínculos o de renovar tejidos. Creo que una pareja debe renovar siempre sus tejidos y no permanecer estática. El amante gay trae vida a la pareja, se convierte en una posibilidad de cambiar, copa la vida de los dos, les das sensación de vida… Laura y Manuel se desbordan frente a Diego, le entregan el poder, se olvidan de ser ellos mismos.
Es la novela más vendida en Chile en los últimos 10 años, y es una novela gay. ¿No es raro para un país que muchos consideran el más conservador de la región?

Debo aclarar que es la más vendida después de Isabel Allende, pero, claro, ella es la más vendida en todo el mundo, como Vargas Llosa (no los estoy comparando). La temática gay está, pero se ha dado en todos los países. En Colombia, en el Perú con No sé lo digas a nadie… No lo veo raro, porque creo que la temática es, fundamentalmente, una pareja heterosexual. La posibilidad de ser bisexual como en el caso de Manuel hace que el triángulo sea más dinámico. Freud siempre defendió eso: un hombre cela a su mujer con otro hombre porque se siente atraído por otro hombre. Es la estructura clásica. Yo no he puesto a Manuel a salir del clóset y a tener problemas de identidad sexual. Él sigue sintiendo que es él, a pesar de que ahora ama a un hombre.

¿Por qué crees en el matrimonio gay?
Creo que es un derecho. Yo tengo muchos amigos que tienen hijos, y son gays. Son padres homosexuales y quieren tener la posibilidad de pasar el fin de semana con sus hijos y con su pareja. Esto, la sociedad lo impide, lo critica. Si un padre y una madre se separan, el niño –por supuesto– puede vivir con el padre y su pareja gay. De hecho, las lesbianas se están inseminando y teniendo hijos. No estamos forzando la naturaleza, pues es algo que ya ocurre. La idea de familia que se quiere imponer es una idea totalmente restrictiva.

¿Los chicos no se ven afectados con la convivencia de dos padres o de dos mamás?
Te respondo con esto: conozco cinco chicos que viven con la abuela porque la madre tuvo un hijo con cada hombre diferente, y con el quinto se fue de la casa. Hay miles de situaciones así. El 50% de niños nace fuera del matrimonio en Chile. Lo importante es que estos niños reciban amor, que tengan la oportunidad del amor.

Se piensa que el gay o la lesbiana se levanta todo lo que camina…
Qué lamentable. Es terrible que, para ser gay, uno tenga que meterse todos los sábados en la noche en una discoteca. Un gay no puede tener un trabajo tranquilo, no puede tener una vida de pareja tranquila, no puede ir con los niños y la pareja al parque, no puede ir a almorzar a la casa de la familia de la pareja el domingo… ¿Qué se espera? El único espacio que encuentra un hombre gay o una lesbiana es la discoteca... Por una vez a la semana se sienten ellos mismos. Cuántos amigos míos han terminado bailando en un ambiente de promiscuidad en estos sitios porque en la seducción encuentran su identidad. La loca seduciendo es un grito desesperado. No es un desplante frívolo. Es la expresión de una persona que no puede disfrutar de su vida normalmente y que, finalmente, debe ponerse plumas para poder existir.
Nota:Puedes saber mas de Pablo en www.pablosimonetti.cl

7 comentarios:

Anónimo dijo...

Te Amo Pablo...Eres lo máximo.!y como Sandy de Grease,te dedico "Hopelessly devoted to you"(Devotamente tuyo sin esperanza")
Un fan enamorado

Anónimo dijo...

Se que estas lejos...que nunca podras amarme...pero el solo hecho de saber que existes...me hace muy feliz!En mis sueños soy tuyo,me acurruco en tu pecho y me pierdo en tus ojos....En mis sueños acaricio tu cabello y me enciendo cuando siento tu aliento sobre mi piel....En mis sueños las fronteras no existen y solo el amor que te tengo basta para nosotros dos...Siempre tuyo,siempre mio,siempre nuestro.

Anónimo dijo...

hola:
Muchas veces las ganas de comentar, decir, explotar los pensamientos envueltos en concreto hacia el exterior, nos llevar a tomar dudas muy muy debiles, lo otro es valor, esa palabra las cual muchos de nosotros nos falta, pero siempre la tenemos presente, nuestra opcion de ser gay es la proxima mayoria en la sociedad, no se a que se deba, si me gustaria saber, ¿porque soy gay? ¿como sali asi? no es malo, lo se...pero todo tiene un origen, me dedico al arte y la mayoria de obras , las plasmo con mis ideales, pensamientos, metas, posibilidades de vida, para mi y para "mi gente".......amante del arte tanto como amante de los hombres............simplemente rija. Buena la historia del escritor.

rija_art@hotmail.com
Lima-Perú

Anónimo dijo...

¡Qué persona más valiente eres! Poder descubrirse y reconocerse es admirable y no sólo por aceptarte y ser aceptado como gay. Soy mujer, sin tabues, ni siquiera me cuestiono a las personas, pero a veces me cuesta lidiar con mis deseos, mi libertad, amo a los hombres, pero no son una prioridad en mi vida. Me gustó mucho una entrevista con Julio Cesar Rodríguez, (él no estuvo a tu altura en las preguntas), pero tu buen humor y honestidad salvaron la entrevista. Es un orgullo que seas un escritor chileno tan bueno, tan educado, de buenas maneras, normal y además de una facha envidiable. Hay en ti algo que tranquiliza...una elegancia natural y poco pretenciosa que se agradece. Es mi sentir con respecto a ti y tus novelas. Gracias, Verónica Faura Raby

kellyech dijo...

Hola Pablo: Eres un escritor fantástico, (ya te lo han dicho millones de veces, no es un comentario nevedoso). Hasta donde se te puede conocer, a través de los medios de comunicación, eres una persona admirable, también te lo han dicho millones de veces.
Respecto a la condición de homosexualidad me parece fantástico que, desde tú posición de escritor, (y de tanto éxito), que es una posición privilegiada respecto al común de las personas,tú te preocupes de alguna manera de ayudar a los homosexuales.
Yo no soy homosexual pero entiendo que esta condición no se elige y no hay algo que se pueda hacer contra ello.
No entiendo cómo una madre puede rechazar a sus propios hijos por esto, el amor de madre se da sin condiciones.
En la vida me ha tocado compartir varias veces con homosexuales y son personas como todos los demás, con esperanzas, sueños, fracasos y sobre todo mucho miedo. Miedo a que los demás "sepan" y los discriminen, "sepan" y los hechen del trabajo, etc,etc.
Lo que no entiendo, y por esto no acepto, es por qué algunos tienen que hacer alarde de su condición, he visto parejas que son absolutamente pornográficas en su actuar, en la expresión de su amor y eso creo que no esté bién para
nadie. Hay espacios donde la gente puede expresar su amor más físico (por decirlo de alguna manera) y homosexuales y heterosexuales deben respetar ciertas normas de conducta, no creo que sea pedir mucho, talvés yo estoy muy vieja y las cosas han cambiado, pero pienso que la buena educación no cambia y debemos ser respetuosos porque vivmos en sociedad, y ser libres no significa hacer lo que quiera a la hora que quiera y donde me de la gana.
Agradezco el espacio y al avance de la tecnología para poder expresar mi opinión.
Agradezco a Dios porque tú, Pablo Simonetti, existes y eres tan buén escritor, ahora estoy leyendo "Madre que estás en los cielos" me falta poco para terminarlo, tan bueno como tus otro libros, o más si se puede.
Te deseo todo el éxito del mundo en todo lo que emprendas.

Anónimo dijo...

¡¡ HOLA PABLO¡ TE DECLARO VOCERO,PLENO DE CORAJE Y HONESTIDAD, CON MAS HOMBRIA QUE QUE TODOS, TE RESPETO Y VENERO HE VISTO TUS ENTREVISTAS Y TE DIGO ¡QUE BUENO FUE NACIARAS TAL COMO ERES PARA DEMOSTRAR LO QUE VALES SIGUE ADELANTE EN TU POSTURA,TU GLADIADOR EN LA ARENA DE LA VIDA, SOLO PIDO QUE EL COSMOS TE ILUMINE X SIEMPRE "ALGUIEN EN EL CLOSET" YA ES TARDE PARA SALIR,EN VERDAD HE SUFRIDO, MAS NO SOY UN INFELIZ, MIS 4 HIJOS, MIS 6 NIETOS ME HACEN SENTIR QUE VALIO EL ERROR DE NO SALIR, MI ADMIRACION Y RESPETO INFINITO QUIJOTESCO

Esteban Varas V. dijo...

Te admiro Pablo,como escritor y como Ser Humano,aunque a veces en facebook hemos tenido nuestras dicrepancias en cuanto a ideologías políticas,y absurdas por supuesto,porque yo no soy un derechista represivo,para nada,yo le di mi voto a Sebastián Piñera,pensando en que se podía lograr un vuelco,un cambio,abrir nuevos horizontes,pero creo que izquierda y derecha es la misma mierda,no hay remedio con la política chilena,es una verdadera perdición...Gracias te doy,por ser la voz de los que no la tenemos,quiero a mi Chile libre,justo y feliz,lo deseo con toda mi alma.Abrazo grande para ti Pablo.